INGREDIENTES
250 g de harina de almendra cruda
5 huevos
250 g de azúcar
La piel rallada de un limón
Una pizca de sal
1 cucharada de café de canela en polvo
1 cucharada de café de levadura química, opcional la auténtica no lleva
Mantequilla y harina para el molde
Azúcar lustre para decorar el pastel
PREPARACIÓN Y COCCIÓN
Preparamos un molde bajo de 30 cm de diámetro.
Lo untamos con mantequilla y lo espolvoreamos con harina.
Precalentamos el horno a 170 ºC, calor de bóveda y solera.
Rallamos la piel de limón evitando la parte blanca y reservamos.
Bol 1
En un bol mezclamos todos los ingredientes secos, harina de almendra, piel del limón, la sal, la levadura y la canela.
Removemos con un tenedor para mezclar bien los ingredientes.
Bol 2
En otro bol ponemos el azúcar, los huevos y los blanqueamos con varillas eléctricas hasta que doblen su volumen.
Incorporamos al bol de los ingredientes secos los huevos montados con el azúcar, poco a poco, en dos o tres veces, envolviendo con la espátula.
Llenamos el molde y horneamos unos 25 o 30 minutos.
Debe quedar dorado por encima.
Hacemos la prueba del palillo y si sale limpio, lo retiramos del horno.
Dejamos enfriar, desmoldamos y espolvoreamos por encima azúcar en polvo con un colador.
PARA SABER MÁS
Cuando ponemos la masa en el molde, debe quedar una capa delgada. Una vez horneada, la tarta tiene más de 2 o 3 cm de espesor. La temperatura del horno puede variar entre 170 ºC y 180 ºC. Cada horno es diferente, hay que controlar. Esta tarta es apta para celíacos, solo hay que cambiar la harina que utilizamos para espolvorear el molde y utilizar levadura química sin gluten.
VIDEORECETA
RESULTADO
Una receta tradicional que no podía faltar en nuestro repertorio de postres. Un pastel ligero, de sabor delicado que os encantará.
Júlia y Montse