INGREDIENTES
6 claras de huevo
140 g de harina
250 g de azúcar
Una pizca de sal
1 cucharada de postres de levadura
90 g de aceite de oliva
La ralladura de un limón
PREPARACIÓN Y COCCIÓN
Preparamos un molde de 20 o 22 cm, lo untamos con mantequilla, espolvoreamos con harina, y sacudimos la que sobre.
Calentamos el horno a 180 ºC.
Rallamos la piel del limón y reservamos.
Tamizamos la harina mezclada con la levadura y reservamos.
Ponemos las claras en un bol, añadimos una pizca de sal y, con varillas eléctricas, las montamos a punto de nieve.
Añadimos el azúcar a las claras sin dejar de remover.
Después, incorporamos la piel de limón.
A continuación añadimos la harina, poco a poco.
Acabamos vertiendo el aceite mientras removiendo suavemente hasta obtener una masa homogénea.
Pasamos la mezcla al molde y horneamos 30 minutos a 180 ºC.
Hay que vigilar la cocción, cada horno es distinto.
Pinchamos con un palillo, si sale limpio retiramos del horno.
Espolvoreamos con azúcar glas.
PARA SABER MÁS
Receta de aprovechamiento. Hemos utilizado las claras que han sobrado al hacer la crema catalana. Con un poco de práctica no hace falta añadir levadura. Las claras bien trabajadas ya hacen su función. La receta original de este bizcocho es del libro Confitería y Repostería, de María Mestayer de Echagüe, Marquesa de Parabere (Bilbao, 1878-1956). La hemos encontrado en el blog Mançanes i no pomes de Chus y Sandra, ellas han sustituido la mantequilla por aceite de oliva para darle un toque más saludable.
RESULTADO
Un bizcocho esponjoso, ideal para el desayuno y la merienda.
Montse y Júlia