INGREDIENTES
2 cabezas de rape grandes
3 tomates de invierno (pequeños, de los de untar pan)
1 cebolla
4 dientes de ajo
1 manojo de perejil
Aceite de oliva virgen extra
Sal
1 rebanada de pan
12 gambas
Agua mineral o filtrada que cubra
Para hacer la picada
1 cucharada de piñones
10 almendras
10 avellanas
Azafrán (unas hebras)
1 galleta María
1 trocito de chocolate
PREPARACIÓN Y COCCIÓN
En una olla ponemos aceite que cubra el Fondo. En frío, incorporan las cabezas de rape limpias y cortadas en dos partes, la cebolla cortada en cuatro trozos, los tomates cortados en dos, los ajos enteros y el manojo de perejil. Encendemos el fuego y rehogamos ligeramente sin llegar a sofreír. Añadimos agua que cubra. Sazonamos. Dejamos hervir a fuego medio una hora aprox. Espumamos.
Colamos el caldo, descartamos las verduras.
Dejamos enfriar las cabezas de rape. Con las manos, retiramos toda la carne y reservamos.
Ponemos el pan (sin freír) en la olla y dejamos hervir 10 minutos. Lo batimos bien.
Incorporamos el pescado reservado desmenuzado.
Freímos ligeramente las gambas, las pelamos y reservamos las colas que cortaremos a trocitos.
Pasamos por la sartén cabezas y pieles Y lo flameamos.
Cogemos una parte del caldo, lo ponemos en un cazo, añadimos el contenido de la sartén, majamos con la maza del mortero para sacar todo el jugo de cabezas y pieles de las gambas.
Colamos y lo añadimos a la olla del caldo.
También añadimos las gambas troceadas.
Hacemos la picada
Envolvemos unas briznas de azafrán con papel de aluminio y lo tostamos ligeramente en los fogones. Cuidado, si nos pasamos de tostado, el azafrán coge un sabor amargo.
En un mortero, majamos los frutos secos, la galleta, el chocolate, el azafrán hasta obtener una pasta homogénea que incorporamos a la sopa.
Removemos, dejamos cinco minutos que se integre en la sopa, probamos el punto de sal y ya lo tenemos.
PARA SABER MÁS
Sopas de rape hay muchas, esta es una de ellas. Fina y ligera por el sabor del rape, y con un toque de azafrán que la hace deliciosa. Cómo me explica Carmen. «Es una sopa de pizcas: la pizca de azafrán, la pizca de chocolate y, lo más importante, una buena picada». Haced más cantidad de fumet y congelad sin manías. Siempre tendréis un fondo de despensa de lujo.
RESULTADO
¿Os gusta la sopa? Hacedla y repetiréis. ¡Que aproveche!
Júlia